El médico que asistió el sábado a David Bustamante ha ratificado que sufría afonía, por lo que suspendió el concierto en Laguna de Duero (Valladolid), y ha asumido el error de usar indebidamente en su informe el membrete del Clínico ya que la atención fue privada en el hotel donde estaba el cantante.
Así lo ha explicado la Consejería de Sanidad de Castilla y León a través de un comunicado, en el que detalla que aunque la gerencia del Clínico de Valladolid considera explicadas las circunstancias por las que el informe médico llevaba membrete oficial del hospital aunque Bustamante no había pasado por el centro sanitario, ha solicitado el inicio de una información reservada para aclarar lo sucedido y las consecuencias.
Este martes la Gerencia del Clínico ha explicado que «ha tenido conocimiento, por parte de un escrito presentado por el propio interesado, de que un facultativo del centro, adscrito al servicio de urgencias, atendió a David Bustamante, el pasado 2 de septiembre», en una asistencia que «tuvo lugar fuera del horario laboral del profesional», según recoge el comunicado.
El médico ha precisado que le atendió en el hotel en el que se alojaba, en una visita privada, y se ha ratificado en el diagnóstico expresado, una faringoamigdalitis aguda y afonía. El facultativo, según las fuentes, ha reconocido además «el error de uso indebido de un impreso membreteado del hospital para esa asistencia sanitaria privada».
La Gerencia del hospital vallisoletano abrió una investigación para conocer por qué había un informe con membrete del Clínico de Valladolid que acreditaba que David Bustamante tenía el pasado sábado una afonía, que le llevó a suspender un concierto en el municipio vallisoletano de Laguna de Duero, cuando en realidad no pasó por ese hospital.
La oficina de management del cantante, GTS, ha emitido un comunicado en el que confirma la versión de la Consejería de Sanidad, alegando que fue «diagnosticado con faringoamigdalitis aguda y afonía».
Según la oficina, «el diagnóstico y tratamiento fue reflejado en el parte médico que se le entregó a Bustamante y que GTS hizo llegar al promotor del concierto como justificante».
GTS ha aprovechado el comunicado para mostrar su «absoluta indignación ante el desagradable cuestionamiento del estado de salud del artista, haciendo reserva de los derechos que correspondan para defender la intimidad del artista ante intromisiones ilegítimas, así como su buen nombre y reputación».
También han asegurado que Bustamante «confía en su pronta recuperación para poder seguir con su gira de conciertos»
Por su parte, Defensor del Paciente ha decidido elevar a la Fiscalía Superior de Castilla y León los hechos. «Lo que pagamos todos lo utilizan algunos médicos como si de su finca se tratara, como éste a su antojo y sus amiguitos, y los demás pobres esperando horas y horas para ser atendidos en urgencias. Entendemos que esto entra irremediablemente en la parte jurisdiccional ya que se pone en riesgo la salud de los ciudadanos», asegura el colectivo en un comunicado.
En su escrito, también se consiedera «difícil de creer» y «de juzgado» que el informe del facultativo recoja una serie de términos que ponen incluso en entredicho su capacidad a la hora de escribir, en alusión a que receta «augmentino», en lugar de augmentine, y recomiende «repovo», cuando quería decir reposo. «¿Qué personal médico contrata la Consejería de sanidad?», se pregunta Defensor del Paciente.