La organización de Consumidores en Acción, Facua, ha asegurado que los fans de Shakira pueden reclamar a la promotora Last Tour el importe de la entrada, así como los gastos de viaje derivados de la modificación de billetes o adquisición de nuevos títulos, tras el anuncio de suspensión de la gira, que afecta a conciertos previstos en Bilbao, Madrid, La Coruña y Barcelona.
La secuencia de conciertos de Shakira en España, enmarcada dentro de su gira mundial El Dorado, se iba a desarrollar en Bilbao el 17 de noviembre, en Madrid el 19 noviembre, en La Coruña el 23 de noviembre y en dos sesiones en Barcelona, los días 25 y 26 de noviembre.
«A finales de octubre, al final de mis ensayos, sentí una ronquera inusual que me impedía cantar. Los médicos detectaron que se había producido una hemorragia en mi cuerda vocal derecha», se ha justificado la artista por la cancelación de los eventos. Por su parte, la promotora Last Tour animó desde su web a los fans a «conservar su entrada», pues según advirtieron, anunciarán «una nueva fecha».
A juicio de Facua, el cambio en las fechas de los conciertos, así como la falta de concreción sobre las nuevas, aún por definir, constituyen motivo suficiente como para que los usuarios reclamen la devolución y reintegro del importe, si consideran que ya no están interesados en acudir al evento en un futuro. La asociación ha instado a Last Tour a atender sin dilación todas las solicitudes de devolución que les sean remitidas por los afectados.
Además, tras las declaraciones de la cantante colombiana que ha asegurado verse «en la obligación de postergar» su gira europea, «hasta 2018», Facua ha recomendado a los usuarios que no puedan asistir en las nuevas fechas que se publiquen, «que exijan no sólo el precio de la entrada, sino también los gastos que se ocasionen como el importe que suponga la cancelación de los billetes de transporte y alojamiento».
Shakira también ha sido noticia en los últimos días por su vinculacaión con los llamados Paradise Papers. Según esta investigación, la cantante habría trasladado a una sociedad offshore sus derechos musicales, valorados en 31,6 millones de euros.